25 mayo, 2011

Ensayo sobre Urbanismo Informal

Es reconocible a primera vista que algunas ciudades están sufriendo una expansión urbana a pasos agigantados, pero el problema no es precisamente eso, sino que es cómo crecen. El tipo de crecimiento que sufren es el de tipo desordenado, donde abunda la informalidad, la improvisación, la necesidad, la desorganización y la espontaneidad de las personas en la obtención de una vivienda. Las grandes ciudades del tercer mundo sufren de este fenómeno masivo llamado Urbanismo informal; adoptando varios nombres en diferentes países como barrios marginales, asentamientos humanos, colonias populares, favelas, comunas, asentamientos informales, asentamientos sub-normales y laderas; el cual representa una amenaza para el buen funcionamiento y desarrollo urbano de las ciudades a corto, mediano y largo plazo, y que recientemente ha despertado el interés de las autoridades y especialistas a fin de resolver este problema con proyectos y planteamientos con resultados en su mayoría no favorables.

Entre las razones principales sobre el origen de este problema se destaca esta letal combinación entre la pobreza y la explosión demográfica que se han convertido en problemas irreversibles concentradas en su mayoría en las principales ciudades de los países no desarrollados. La pobreza trae consigo el difícil alcance o exclusión de las personas al mercado formal de suelo urbano y vivienda, esto combinado con la gran masa de gente en busca de un lugar donde establecerse y migrando a las grandes ciudades en busca de oportunidades laborales, trayendo consigo la urbanización informal llamada comúnmente invasiones y la autoconstrucción informal de viviendas como la única alternativa para lograr obtener esta necesidad básica y esencial que millones de personas aun buscan.

La urbanización y autoconstrucción de viviendas en estos lugares conocidos como barrios populares o colonias populares siempre están en un constante proceso de cambios morfológicos y extensiones, pero a su vez se ha convertido en el paisaje de las ciudades. El desarrollo de estas zonas ha estado sujeto a obtener el máximo provecho del terreno, muchas veces creciendo por décadas hasta llegar al punto máximo de saturación, trayendo consigo el aumento alarmante de la densidad y la espontaneidad en la construcción de los edificios, así mismo, esto trae como consecuencia un cambio en el uso del suelo, propiedad urbana y variaciones en el valor del suelo.

Un punto importante en todo este tema del urbanismo informal son las masivas migraciones desde las provincias hacia las capitales, estas formaciones urbanas originadas por este proceso han recibido el nombre de constelaciones urbanas, ya que contienen un sin número de particularidades y diferencias en su interior propios de su origen geográfico y cultural. Sin embargo, la ocupación de territorio de difícil topografía y su transposición a lugares donde conviven con la urbanización consolidada los convierten en actores de una metamorfosis digna de considerarse un desafío.

Cabe resaltar que además de los pobladores que son los actores principales de este fenómeno llamado urbanismo informal, no se debe olvidar a las autoridades, ya que el urbanismo informal es también producto de la falta de autoridad y aplicación de decisiones políticas, que generan un desbalance sistemático entre sociedad – política y economía, afectando a la gran mayoría de personas poniéndoles limites en sus posibilidades y beneficiando a otro pequeño sector ampliando sus fronteras de crecimiento; esto es a lo que llaman pobreza de muchos y riqueza de pocos. Tomando en consideración que la pobreza en si no existe, sino que existen las personas pobres, y este es el primer punto de partida que deberían tomar las autoridades para poder enfrentar esta enfermedad social, colocando al poblador como un co-actor y participe en los planes por enfrentar y mitigar la pobreza y la marginalidad. Entonces la pobreza se convierte en sinónimo de un desconocimiento urbano, urbanismo informal y esto se materializa en los asentamientos humanos marginales o barrios (colonias) marginales con todos sus posibles atributos tales como la ilegalidad y la irregularidad en su formación urbana, la deterioración físico-ambiental de su entorno, la inaccesibilidad a la tierra y su propiedad, la extrema baja calidad de vida en términos de escala de desarrollo humano, que se llamarían la inaccesibilidad a los bienes y a las necesidad humanas básicas. Este problema de vuelve mayor si se observa desde la perspectiva de una era llamada moderna y tecnológica, donde el suelo sigue siendo un factor económico, y quizás la escasez de esta, y su inaccesibilidad a la propiedad son los indicadores principales de la pobreza que son el generador inicial de conflictos sociales, que en primer instancia podrían ser enfrentados con el uso del buen manejo del suelo.

Y si hablamos de conflictos sociales y manejo del suelo, entonces tendríamos que hablar de esta relación entre la ciudad formal y la ciudad informal o el urbanismo formal y el urbanismo informal; el fenómeno masivo de la urbanización espontanea y la autoconstrucción de las viviendas que se manifiesta en aspectos de organización urbana, aspecto urbano y la continua transformación del espacio, ha sido la forma de urbanización dominante en muchas mega ciudades de países del tercer mundo, y como la alternativa principal de la mayoría de los habitantes. Por esto la urbanización informal y su explosivo crecimiento representan la mayor parte del área urbana y viviendas de las ciudades, siendo los sectores urbanos formales consolidados absorbidos por este desarrollo informal; sin embargo esta aparente absorción es solo visual, ya que en realidad lo que surge es una alta estratificación de las ciudades en términos de acceso a los servicios básicos, capacidad económica y adhesión a los derechos, saltando a la vista la notoria dualidad entre ciudad formal y ciudad informal o marginal adoptando varios nombre en diferentes países. Trayendo como consecuencia el cambio del significado de ciudad, ya que ahora se piensa que no existe ciudad, sino que existen ciudades dentro de una gran mancha urbana.

Sin embargo en la búsqueda de soluciones a este problema urbano, el urbanismo informal, a pesar de sus defectos y consecuencias, nos ha enseñado muchos temas que permanecían ocultos por mucho tiempo y también muchas alternativas de expansión urbana y constructiva, que modificados y manejados de una forma conveniente y planificada, serian parte del paquete de acciones para resolver este fenómeno. Cabe resaltar aquí la capacidad de las personas en el aspecto de la autoconstrucción, ya que este se convierte en una “autoconstrucción profesional” debido a la destreza en la organización de espacios siguiendo lineamientos guiados por la intuición y la experimentación. El desarrollo de estas zonas pareciera que nunca llegaran a su fin debido a su aparente complejidad, y este desarrollo está marcado por la adhesión de viviendas a otras viviendas siguiendo un trama de módulos reticulares, dando posibilidades de un crecimiento casi ilimitado teniendo tan solo como limites la cantidad de espacio para ocupar. En muchos casos los pobladores basan sus construcciones en modelos cubistas, como lo fue los primeros modelos de la arquitectura moderna, sin embargo es interesante cuando se reflexiona acerca del origen de esto, ya que es el origen de la arquitectura, osea la necesidad de una techo; y es exactamente eso lo que ocurre con el urbanismo informal que responde a la necesidad de tener simple diseños para las clases de bajos ingresos económicos. Y estos fueron anexados a proyectos de modernización espacial y social que resultaron fallidos.

Concluimos entonces, que el urbanismo informal es un problema urbano que afecta a varias ciudades en proceso de desarrollo; sus orígenes se centran en problemas sociales como la centralización de riquezas, carencia de decisiones políticas, pobreza y explosión demográfica. Sin embargo este fenómeno nos ha enseñado a reconocer y reparar los errores que todos los actores han cometido ya que ahora lo tienen presente todos los días como parte del paisaje urbano; y a revalorar, mediante el esfuerzo de sus pobladores en aprovechar el espacio al máximo, el noble origen de la arquitectura, y por consiguiente también del urbanismo, que es la necesidad de obtener un espacio donde poder desarrollarse al que la razón le llama vivienda y el corazón, hogar.